Versátil
NNRD lleva muchísimos años siendo un cliente fijo de Knapen Trailers; compraron su primer remolque Knapen en 2009. Su especialidad es la gestión de residuos y trabajan en las regiones neerlandesas de Frisia, Groninga y Drenthe. Se encargan de la recogida, clasificación y reciclado de diferentes tipos de residuos de la zona. En su variado parque de vehículos se pueden encontrar ocho versátiles remolques con suelo deslizante Knapen que recorren unos 130.000 km anualmente.
Hablamos con Jan Kuipers que lleva más de 30 años trabajando en la rama de residuos. Lleva desde 2017 trabajando como responsable de operaciones para NNRD para las sucursales de Harlingen, Drachten y Groninga.
«Nuestros remolques naranja Knapen son conocidos en la región».
Lo que empezó hace 25 años con un camión triturador se ha convertido en un parque de vehículos con muchos vehículos diferentes. Desde camiones elevadores con gancho hasta semirremolques especiales para residuos peligrosos, camiones trituradores y remolques Knapen con suelo deslizante. El año pasado entraron los últimos 2 remolques Knapen con suelo deslizante. Jan nos cuenta, con orgullo, que los semirremolques naranja de NNRD se han convertido en una imagen simbólica del paisaje urbano de la zona.
Las ventajas de trabajar diariamente con los remolques con suelo deslizante de Knapen es que tienen una gran capacidad y siempre pueden descargar de forma segura. Incluso en interiores, donde el espacio tiene una altura limitada. Los volúmenes que se transportan con un remolque con suelo deslizante no se pueden cargar con un volquete, y tampoco se pueden descargar de forma segura. La seguridad es esencial y si hay que cargar y descargar 4 o 5 veces al día, la mejor elección es un remolque Knapen con suelo deslizante.
«Un remolque Knapen es ideal para los servicios que prestamos».
Gracias a los remolques Knapen con suelo deslizante podemos transportar todo tipo de cargas. Sobre todo, residuos voluminosos como madera, plástico, envoltorios y residuos de construcción y demolición pero también abono, turba y serrín. Estos residuos se tratan para convertirlos en materia prima para nuevos productos.
Cuando transportamos serrín, podemos cargar hasta 22 toneladas. Cuando llevamos residuos de construcción y demolición, el semirremolque va cargado al máximo. Gracias a los contadores incorporados, los conductores pueden controlar el peso de la carga.
«En realidad, transportamos de todo, menos lo que no quepa».
Tenemos buenas experiencias con los semirremolques Knapen, tan en temas de mantenimiento como de vida útil. Nuestro remolque Knapen más antiguo es del 2014 y todavía sigue en pleno uso. Sin embargo, un buen mantenimiento es importante para una larga vida útil.
Para temas de mantenimiento, contamos con un centro de asistencia en Drachten que es muy práctico. Nuestro propio taller cuenta con materiales para poder llevar a cabo pequeñas tareas de mantenimiento o simples reparaciones. Para grandes tareas de mantenimiento o revisiones, llevamos los semirremolques a Knapen Service en Deurne.
Para mantener en buen estado los semirremolques, nuestros conductores son responsables de la limpieza y cuidado diarios. Una buena limpieza, alarga la vida útil.
Leffert Tiekstra lleva más de 30 años trabajando como conductor, de los cuales 20 para NNRD. Conduce un remolque con suelo deslizante desde 2009.
Solo con pulsar un botón, se descarga toda la carga y ya está. Un gustazo. Antes trabajaba con un volquete, pero no tengo una buena impresión. Además un remolque Knapen tiene un aspecto impecable, sobre todo la parte de atrás, con un parachoques con un diseño perfecto.
«Mi remolque Knapen es un leal seguidor».
